JUAN 4,5-12
Hagamos esta Lectio
teniendo en cuenta 7 momentos y siete grupos de
palabras que aparecen en el texto.
Iniciemos situando los distintos momentos del pasaje: encontramos una
introducción, que nos ubica en el espacio y el tiempo, una conclusión final y
entre estos dos hallamos 5 diálogos.
En el texto encontramos
ocho grupos de palabras de gran relevancia:
1. La mujer samaritana o
de Samaria o simplemente la mujer (14 veces)
2. Adorar (10)
3. Jesús (7)
4. Agua (8)
5. Pozo (4)
6. Marido (5)
7. Comer (3)
8. Cristo (2) – Mesías (1) Rabbí
(1) – Salvador (1) 1. UBICACION DE LA ESCENA: Samaria, Sicar, pozo de Jacob, medio día.
5 Llega, pues, a una ciudad de Samaria llamada Sicar, cerca de la heredad que Jacob dio a su hijo José. 6 Allí estaba el pozo de Jacob. Jesús, como se había fatigado del camino, estaba sentado junto al pozo. Era alrededor de la hora sexta.
2. PRIMER DIALOGO: tema central: el agua
7 Llega una mujer de Samaria a sacar agua. Jesús le dice: «Dame de beber.»
8 Pues sus discípulos se habían ido a la ciudad a comprar comida. Le dice a la mujer samaritana:
9 « ¿Cómo tú, siendo judío, me pides de beber a mí, que soy una mujer samaritana?» (Porque los judíos no se tratan con los samaritanos.)
10 Jesús le respondió: «Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: “Dame de beber”, tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua viva.»
11 Le dice la mujer: «Señor, no tienes con qué sacarla, y el pozo es hondo; ¿de dónde, pues, tienes esa agua viva? 12 ¿Es que tú eres más que nuestro padre Jacob, que nos dio el pozo, y de él bebieron él y sus hijos y sus ganados?»
13 Jesús le respondió: «Todo el que beba de esta agua, volverá a tener sed; 14 pero el que beba del agua que yo le dé, no tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le dé se convertirá en él en fuente de agua que brota para vida eterna.» 15 Le dice la mujer: «Señor, dame de esa agua, para que no tenga más sed y no tenga que venir aquí a sacarla.»
3. SEGUNDO DIALOGO: tema central: los maridos
16 El le dice: «Vete, llama a tu marido y vuelve acá.» 17 Respondió la mujer: «No tengo marido.» Jesús le dice: «Bien has dicho que no tienes marido, 18 porque has tenido cinco maridos y el que ahora tienes no es marido tuyo; en eso has dicho la verdad.» 19 Le dice la mujer: «Señor, veo que eres un profeta.
4. TERCER DIALOGO. Tema central: Adorar
20 Nuestros padres adoraron en este monte y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar.» 21 Jesús le dice: «Créeme, mujer, que llega la hora en que, ni en este monte, ni en Jerusalén adoraréis al Padre. 22 Vosotros adoráis lo que no conocéis; nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación viene de los judíos. 23 Pero llega la hora (ya estamos en ella) en que los adoradores verdaderos adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le adoren. 24 Dios es espíritu, y los que adoran, deben adorar en espíritu y verdad.»
5. CUARTO DIALOGO: Tema central El Mesías
25 Le dice la mujer: «Sé que va a venir el Mesías, el llamado Cristo. Cuando venga, nos lo explicará todo.» 26 Jesús le dice: «Yo soy, el que te está hablando.»
27 En esto llegaron sus discípulos y se sorprendían de que hablara con una mujer. Pero nadie le dijo: «¿Qué quieres?» o «¿Qué hablas con ella?»
28 La mujer, dejando su cántaro, corrió a la ciudad y dijo a la gente: 29 «Venid a ver a un hombre que me ha dicho todo lo que he hecho. ¿No será el Cristo?» 30 Salieron de la ciudad e iban donde él.
6. QUINTO DIALOGO: Tema central: la comida
31 Entretanto, los discípulos le insistían diciendo: «Rabbí, come.» 32 Pero él les dijo: «Yo tengo para comer un alimento que vosotros no sabéis.»
33 Los discípulos se decían unos a otros: «¿Le habrá traído alguien de comer?» 34 Les dice Jesús: «Mi alimento es hacer la voluntad del que me ha enviado y llevar a cabo su obra. 35 ¿No decís vosotros: Cuatro meses más y llega la siega? Pues bien, yo os digo: Alzad vuestros ojos y ved los campos, que blanquean ya para la siega. 36Ya el segador recibe el salario, y recoge fruto para vida eterna, de modo que el sembrador se alegra igual que el segador.
37 Porque en esto resulta verdadero el refrán de que uno es el sembrador y otro el segador: 38 yo os he enviado a segar donde vosotros no os habéis fatigado. Otros se fatigaron y vosotros os aprovecháis de su fatiga.»
7. CONCLUSION
39 Muchos samaritanos de aquella ciudad creyeron en él por las palabras de la mujer que atestiguaba: «Me ha dicho todo lo que he hecho.»
40 Cuando llegaron donde él los samaritanos, le rogaron que se quedara con ellos. Y se quedó allí dos días. 41 Y fueron muchos más los que creyeron por sus palabras, 42 y decían a la mujer: «Ya no creemos por tus palabras; que nosotros mismos hemos oído y sabemos que éste es verdaderamente el Salvador del mundo.»
Sin duda la gran protagonista es la mujer de Samaria que aparece 14 veces. El evangelista pretende darle relevancia. Ella en su número supera al pueblo de Israel cuya cifra es 12. Por ello la samaritana no representa solo una mujer que encuentra a Jesús, ella es la representante de un pueblo: Samaria que busca al Mesías.
El pozo: es el lugar amoroso por excelencia en la
Biblia, el lugar de los grandes encuentros que marcaron la historia de los
patriarcas y sus esposas. El encuentro de Jesús y el pueblo de Samaria se lleva
a cabo en un diálogo amoroso que avanza cada vez más en profundidad.
El agua signo de vida y renacimiento es el tema central del 1er
diálogo. Es una necesidad en los dos enamorados, ambos quieren beber y ambos
quieren ofrece agua. El diálogo avanza en profundidad. Empieza a tocar lo secreto
del corazón…
Así se llega al 2º diálogo. Un
tema fuerte en las relaciones amorosas, la infidelidad. Los maridos significan
los ídolos y Samaria sabe bien que ella ha tenido más de cinco Baales (2Re
17,24-41). Pero tiene como merito que es una mujer en búsqueda del Mesías, quien
espera encontrar su verdadero y definitivo marido y señor.
Y seguimos avanzando en profundidad. De los maridos vamos al culto, hay mucha relación en la secuencia. La palabra adorar que aparece 10 veces. Está ubicada en el eje del texto, en la sección central. Nos indica que algo hay que profundizar a nivel del culto. Y nos brinda una frase de Jesús justo en el corazón del pasaje: porque la salvación viene de los judíos.
De nuevo la búsqueda de Samaria:
encontrar al Mesías, esperarlo... Mesías en hebreo y Cristo en griego hacen
referencia a la misma esperanza. Samaria lo reconoce y así lo
anuncia a sus hermanos
Mientras los propios
discípulos hasta ahora solo lo reconocen como Rabbí, es decir maestro, pero aun
no han avanzado en profundidad.
Parece que cuando algo no
entiende los discípulos se quedan en temas de comida, recordemos a Marcos
8,13-21. Pero Jesús busca como
llevarlos más lejos de la simple comida material.
La conclusión es maravillosa,
el pueblo de Samaria acoge a Jesús dos días entre ellos, lo reconocen y le dan
el gran título que Él ya porta en su nombre Jesús es decir el Salvador del mundo.
Para terminar valdría la pena preguntarnos, por nuestro
propio itinerario de fe. ¿Avanzamos en profundidad? ¿Reconocemos verdaderamente
en Jesús de Nazaret al Salvador del mundo, al Mesías?